— ¿Interrumpo?
— Por supuesto que no, Jefe Cheng. Por favor tome asiento
— Ada querida, rara vez te veo aquí en la cafetería, te vi sola y noto en ti cierto gesto de preocupación
— Es verdad, estoy en medio de un caso muy complicado y no he podido resolver nada, cada que encuentro una pista nueva, descubro que me adentra más y más en un laberinto de absurdas complicaciones
— Bueno, así es este oficio, la investigación policial no siempre consigue resolver todos los crímenes y misterios, y aquellos que si se logran solucionar tardan a veces años y emplean bastante personal
— No es como en las películas o los libros de detectives, en donde el Inspector Hércules Poirot encuentra una colilla de cigarrillo encendida en el piso y de ese modo deduce que el asesino debió haber sido el enano de Brooklyn, ya que normalmente para un hombre de más de 6 pies, al caer al piso, la llama debió haber consumido todo el cigarro
— Te entiendo perfectamente
— A veces desearía que las cosas no fueran tan difíciles
— Existe una manera de resolver cualquier misterio
— No te entiendo, ¿qué tratas de insinuar?
— Lo siento, querida, no debí haber dicho eso
— Pero lo dijiste, ya me tienes intrigada
— ¿Has escuchado alguna vez algo así como el "Expediente clasificado número 37"?
— Jamás en mi vida he escuchado tal cosa
— Muy bien, existe una sección de la Agencia Estatal de Inteligencia llamada la Unidad 731, en donde se almacenan toda clase de incidentes inexplicables
— ¿Cómo unos Archivos-X?
— No exactamente, más bien como la bodega que aparece al final de la película de Indiana Jones
— Y el número 37 es una de las tantas cajas arrumadas en un lugar secreto
— Bingo
— Pues de nada sirve porque ese tema es solo comidilla de lunáticos y conspira-sionistas
— Más o menos aciertas, pero no te hubiera dicho yo esto si no fuera porque trabajé directamente en el dichoso Expediente 37
— Ok, te sigo, cuéntalo todo de una buena vez, sin rodeos
— Ese caso es un diario de investigación científica de un tal Vizconde Bathory, escrito a principios del siglo XX, en donde describe como construyó una máquina que le permitía proyectar su conciencia fuera del cuerpo
— ¿Máquina?
— La llamó "Retroproyector Neurofásico"
— No me dice nada el nombre
— A mí tampoco, pero básicamente el artefacto le permitía al tal Vizconde hacer una proyección de su mente fuera del cuerpo. Y esa proyección podía recorrer el castillo que él habitaba, digamos de la misma manera que lo haría un fantasma
— Pues eso es fantástico, ¿cómo es que no tenemos esa máquina en uso para resolver nuestros casos? Con algo así podría uno proyectarse directamente en la guarida de cualquier ladrón y averiguar los detalles exactos de sus crímenes
— Es posible, pero parece que al Vizconde se le salió de control su invención
— ¿Cómo fue eso?
— Como ya te he dicho, El Vizconde creía que estaba haciendo una proyección de su conciencia de una manera muy similar a como sería una alma descarnada o fantasma, si así lo quieres, de modo que al apagar la máquina la proyección simplemente desaparecía, pero a la postre descubrió que en realidad la máquina estaba haciendo copias de su propia mente
— Entiendo, si yo usara la dichosa máquina, toda mi conciencia quedaría copiada y flotando a la deriva sin un cuerpo
— Precisamente querida Ada
— Y debido a ello, el Vizconde decidió destruir el "Proyector Astral"
— "Retroproyector Neurofásico", para ser precisos. Pero lo cierto es que no lo destruyó
— ¿Qué?
— La máquina aún existe, aunque está desarmada y cada una de sus partes ha sido enviada a diferentes localizaciones alrededor del mundo, para evitar su uso
— Pero dices que dejo un diario, de seguro allí se encuentran los planos para rehacer la máquina
— Al diario le faltan ciertas páginas clave, el Vizconde fue muy cuidadoso en ello, parece quería evitar a toda costa que alguien tratara de copiarle su invento.
— ¿Y qué ocurrió con las “proyecciones” del Vizconde?
— No sabemos, lo único que podemos especular es que quedaron "flotando", viviendo entre nosotros como fantasmas sin sabana
— Lo que me has dicho parece que es una tecnología fascinante, quizás el Vizconde no previo exactamente las consecuencias de sus investigaciones, pero nosotros sabiendo ello y ya con los recursos que ofrece el siglo XXI, deberíamos intentar de nuevo construir un artefacto similar para ponerlo al servicio de la humanidad
— Mi bella Ada, siempre tan aguda pero ingenua a la vez. Dime ¿qué te hace pensar que el Gobierno no ha intentado de nuevo reconstruir esa máquina infernal?
— ¿Insinúas que tenemos un nuevo modelo de lo que descubrió el Vizconde?
— Eres detective, ¿no?, hay tienes un caso a investigar o tómalo como un simple rumor de cafetería policial
— Mi tiempo de almuerzo ha terminado, pero gracias por la info
— Una cosa más ... Detective Ada Escualor
— Ya lo sé de memoria: Negarás que esta conversación tuvo lugar
— ¡BINGO!
Se dice que habra una subasta privada en Paris en donde un millonario intentara adquirir una pieza clave del dichoso artefacto....
ReplyDeletepero esto no le ayudará para el caso que le ocupa, a no ser que los fantasmas viajen en el tiempo. Si viaja en el tiempo siempre puede contratar s Poirot.
ReplyDeleteesto es para el tintero, no?
Tengo que aguante la fiesta porque veo que tiene 900 palabras justas, y en la segunda entrada de Ada falta la palabra "vez", se sobreentiende, pero no está. Así que vas a tener que hacer recortes😜
@brazooi
¡Je,Je,Je! ¡¡¡Estupendo!!! El retroproyector neurofásico aúna de una tacada la posibilidad de Bilocación, El Viaje Astral Clásico y La Disociación Patológica de criminalísticas de canon. Es un ingenioso aserto para proseguir investigaciones con dotes de invisibilidad y Ada debe estar muy orgullosa. Además, para la enjundia que planteas tan buena, magnífica y pensada en este texto, es asombroso el tono desenfadado y amenísimo que logras y con humor. Adoro, de otro lado, la magia de los guarismos; esto es: la relación de que el expediente se denomine "37", y La Unidad de Operaciones especiales sea la "731" ¡¡¡¡¡¡¡ en los Altos Asuntos de Inteligencia, existen interconexionessss!!!
ReplyDeleteSiempre dije dada mi experiencia mundana y chiflada por esos mundos de Dios Nuestro Señor, que no existe nada como solucionar asuntos de otacustas infinitos en una cafetería ante un buen té o café o Un Drambuie; o si es en una taberna, que sea ante abundante cena de fogón y cálidos vinos Paternina
¡¡¡¡¡¡¡Como de costumbre, Hugo, ha resultado nutricio y literario leerte....cum laude, diría yo!!!!!!!!!!!
💎 🕯
Hola Jose, muchas gracias por tu participación en el concurso del Tintero dedicado a Isabel Allende, has adaptado a tus detectives a este nuevo concurso, muy ingenioso.
ReplyDeleteUn abrazo. :)
¡Guau, qué relato tan fascinante! Me encantó la manera en como se construyó la intriga desde el diálogo entre los personajes. Me sentí totalmente inmersa en la conversación entre Ada y el Jefe Cheng, como si estuviera allí mismo, en la cafetería, escuchando cada palabra. Y el final, ¡qué final! Ese intercambio de cierre fue genial, dejando la puerta abierta a un montón de posibilidades.
ReplyDeleteLucy Ferro
Hercules Poirot se tomaba su tiempo para resolver los casos. Y si le cree a las intepretaciones de Kennet Brannagth, tenía un sueño muy pesado.
ReplyDeletePodbre Ada, el cambiante idioma de Aragca le altera el nombre.
Y ahora tiene un enigma más para investigar, en lugar de un recurso que le facilite la resolución.
Puede ser que la máquina esté funcionando. ¿No somos como fantasmas rondando a Ada?
Saludoss.
Seguro que hay algún "retroproyector neurofásico" espiando por ahí. Muy bueno.
ReplyDeleteSería todo un hallazgo recuperar este fantástico artefacto y haciéndole ciertos ajustes ayudara a nuestra protagonista en su trabajo detectivesco y policial! Muy ingenioso el relato y el mecanísmo "neurofásico"! Un abrazote y mucha suerte en el concurso!
ReplyDeletePues ese invento sería muy útil, bien usado, por supuesto. Un texto ágil y realemente inquietante.
ReplyDeleteUn abrazo
Hola Jose.
ReplyDeletePues el tema de las investigaciones se complica con espectros deambulando por ahí sin control. ¡Me encantó el tema y el relato! Un abrazo.
Marlen
Uy la investigación se complica al igual que la trama. Te mando un beso.
ReplyDeleteUna investigación llena complicaciones. Genial fragmento. Te mando un beso.
ReplyDeleteMe dan ganas de buscar las piezas y proyectarme eternamente.
ReplyDeleteSaludos.
Estupendo, Jose. Unos fantasmas futuristas que quizá tengamos a la vuelta de la esquina. Muy buen relato.
ReplyDeleteVete a saber los descubrimientos que los distintos Gobiernos del mundo, nos están ocultando. Todo lo que escribamos se nos queda corto :))
ReplyDeleteSAludos.
Una idea estupenda, muy buena, desarrollada en un diálogo ágil y atractivo, con gancho. Lo de que queden por ahí los alter egos flotantes del vizconde me ha encantado. Felicidades!
ReplyDeleteSaludos :)
Claramente cuando un jefe pregunta si interrumpe algo sabe que lo está haciendo pero quiere recibir una respuesta negativa para saber a quién despedir y a quién no en la purga del siguiente fin de año.
ReplyDeleteSaludos,
J.
Un buen invento si se usara para el bien, pero conociendo a la humanidad, no sé que pasaría. Por cierto el otro día andaba una especie de sombra por estos lados muy extraña, ¿sería una proyección del vizconde?.
ReplyDeleteMuy buen relato, saludos.
PATRICIA F.
Pues a la pobre Ada no se si le habra ayudado pero seguro que causado curiosidad. Muy bien escrito Jose. Un abrazo.
ReplyDeleteJa, ja, ja, ja. Tendrán que llamar a los Cazafantasmas.
ReplyDeleteHola Jose, que bueno e interesante el tema de esa maquina cuyo nombre es complicadillo de pronunciar jejeje, y que buenos los diálogos entre los protagonistas.
ReplyDeleteSi encuentran la máquina espero que podamos utilizarla para mejorar el mundo que ultimamente esta bastante pachucho.
Bien contado mantiene la intriga hasta el final.
Un abrazo
Puri
Un toque moderno para crear inquietud...enhorabuena
ReplyDeleteOtra tal Ada, hija de un tal Byron, es una de las culpables de que podamos usar estos medios, y solo por eso ya me atrae tu historia. Una historia que engancha, a pesar de que solo hay diálogos, o precisamente por eso, porque estos fluyen muy bien, y contienen caracterización, referentes, una trama imaginativa... Bien por ti: no es nada fácil.
ReplyDeleteUn abrazo.
Muy original, José, me encanta esa idea del Retroproyector Neurofásico, y me he quedado con ganas de saber a qué se dedican ahora las proyecciones del Vizconde. Muy buen relato, un abrazo!
ReplyDeleteUn relato fascinante, jocoso, con “migas” que van marcando el camino. Acción, investigación y reto muy bien resuelto, en una cafetería como debe ser. El retroproyector neurofásico, un gran invento del vizconde Bathory. Y las proyecciones de su mente se quedaron en nosotros vagando como fantasmas sin sábana. Tratándose de un Bathory, tienen que ser proyecciones asesinas. No das puntada sin hilo y lleva el nombre de la Condesa Sangrienta.
ReplyDeleteQué bien colocas, como ahí queda eso, al detective Poirot de Ágatha Christie y al actor enano Dinklage. La unidad 731 de los japoneses es para echarse a temblar. Deduzco que el jefe Cheng sabe más por lo que calla que por lo que habla. Y ahí está el misterio y la intriga del relato. Ese fondo de bodega de Indiana Jones no es para hacer un brindis.
Un abrazo!
Interesante y original relato, narrado con agilidad. Buen punto de partida que te deja con ganas de más. Suerte en el concurso. Un saludo.
ReplyDeleteHola!!! La semana pasada vi "Cazafantasmas y el reino de hielo" y aparece una máquina similar a la de tu Vizconde!!! Me encanta ese formato de relato, todo a través de diálogos. Un saludo
ReplyDeleteUn artefacto que recuerda mucho a la IA. ¡Genial que adaptes a tus personajes a cualquier contexto!
ReplyDeleteMe quedo con ganas de conocer más a fondo si recuperarán o no esa máquina.
¡Suerte en El Tintero!
Un abrazo.
Una imaginación desbordante, José, y haces encajar el relato de manera original y con el dichoso número 37 de fondo, últimamente me lo encuentro en todas partes, o la paranoia ya es parte de mí. Felicidades por este universo que no para de expandirse.
ReplyDeleteUn fuerte abrazo
Hola, Jose. Habrá que seguir los pasos de la subasta para ver en manos de quien se queda este artefacto. Si habrá un único comprador con testaferros para mantener oculta su identidad.
ReplyDeleteSaludos y suerte.